Indo – Con esta batería acústica grabamos el álbum – Join the Party – , 2º en la discografía de la banda STOP STOP!, (que más tarde triunfó en Europa y E.E.U.U.). Eligiendo y afinando cada parche literalmente al milímetro, colocando cada micro en el punto justo que la experiencia enseña, con mucho amor y cariño a la música y también al rock’n’roll, y con un músico, un baterista, una persona que se dejó su alma y sensibilidad, toda su fuerza y pasión en cada toque, en cada canción que tuve el placer de producir, grabar y mezclar. Él nos dejó su Ser.
Le ayudamos a sacar el máximo partido a su destreza, su gran feeling y/o expresividad, y nos adaptamos a él para extraer su mejor interpretación. Ninguna máquina lo puede sustituir.
Ellos, los bateristas son los primeros y grandes olvidados, son apartados, repudiados. Esto es en gran parte lo que le pasa a la música ahora. Con los demás componentes del grupo pasa exactamente lo mismo. Las máquinas poco a poco los van sustituyendo, sampleado de baterías, utilización de disparadores, demasiada edición, procesamiento desbordado, copia y pega de los riff, es una fiebre. La música enferma. En estos últimos años se está desvirtuando, se ha convertido en un producto artificial, enlatado y frío. Se muere. De qué modo una máquina puede expresar sentimiento alguno.
Muchos músicos y/o productores, discográficas no parecen darse cuenta de ésto, pero ellos mismos la están destruyendo. El público general busca el auténtico sonido en el pasado, en los viejos vinilos, equipos analógicos… Pero no está en el formato la diferencia, por más que se empeñen en confundirnos, si no en el modo en que se grabaron esos preciosos álbumes. Estaban interpretados por músicos no por máquinas. La música es puro sentimiento solo la naturaleza es capaz de este milagro.
Grandes álbumes se grabaron durante los 70 y 80, más tarde con exceso de tecnología todo poco a poco se fue desvirtuando. Nosotros seguimos trabajando como se hacía antaño, con aquella pasión y valoración máxima por la interpretación del músico, facilitar y allanar el sendero para que sea capaz de transmitir sus emociones que es lo que buscamos cuando escuchamos una gran canción, que nos llegue al corazón, que nos emocione.
Con nuestra sensibilidad y experiencia para nosotros es muy fácil lograrlo, déjate guiar, fluye…